lunes, 15 de marzo de 2010

Semana Santa en Bulgaria


La República de Bulgaria, situada en el sudeste de Europa, es un pequeño país, pero muy rico culturalmente, ya que cuenta en su haber, con varios monumentos declarados Patrimonio de la Humanidad.

Bulgaria es uno de los mejores destinos para disfrutar de Semana Santa, ya que cuenta con un gran patrimonio en Iglesias y Monasterios muy interesantes para visitar.

Y para comenzar a conocerlo, tenemos que dirigirnos a su capital, Sofía.

Con un poco más de un millón de habitantes, esta es una ciudad moderna, que ofrece varios atractivos turísticos.

Uno de ellos, son los naturales. Su ubicación privilegiada, en medio de una llanura rodeada por montañas, la dotan de aguas termales, por lo que en la región, abundan los balnearios y spa, muy recomendados para realizar los reconfortantes baños y tratamientos termales.

El otro atractivo, es el centro histórico. El mismo, es recomendable recorrerlo a pie, para no perdernos detalle. Allí se encuentra la pequeña Iglesia de San Jorge, conocida también como la Rotonda, edificio que data de los siglos II y III. En la actualidad, alberga un museo, en donde se exhiben sus impresionantes frescos.

Cerca de ella, se encuentra la iglesia de Santa Sofía. Con su fachada de color rojo oscuro, es uno de los edificios religiosos que también vale la pena conocer. La misma le dio el nombre a la ciudad, y ha sido construida durante el imperio de Justiniano.

La Catedral Alexander Nevski, es uno de los principales monumentos de la ciudad, ya que ha sido construida en honor a los soldados rusos caídos en la Guerra de la liberación de Bulgaria. Es el mayor edificio religioso del mundo. En su interior sobresale su decoración en mármol y la cúpula de oro.

Para completar las visitas religiosas, debemos dirigirnos a la Iglesia de San Nicolás, otro bello edificio, dominado por cúpulas doradas y detalles en mosaicos verdes, que le dan ese aspecto inconfundible.

El Boulevar Vitosha, es la calle más animada de Sofía. Un buen lugar para ir de compras, ya que allí se encuentran las mejores tiendas, o bien para hacer algún descanso y sentarse en algunos de los tantos bares y cafés.

El Monte Vitosha, en las afueras de Sofía, es uno de los sitios indicados para disfrutar de la naturaleza.

Allí se encuentra el Parque Nacional Vitosha, rico en flora y fauna. Además, es propicio para realizar actividades como el senderismo y el esquí, ya que allí funciona el centro invernal “Aleko”.

De origen volcánico, esta montaña, se encuentra seccionada en cuatro partes, siendo el Pico Negro, la más alta de la montaña, a 2.290 metros de altura, en donde funciona una estación meteorológica.

Destaca en el Monte Vitosha, el Río de Piedra. Se trata de un camino de canto rodado, que sigue el curso del río Vladaiska, en la ladera de la montaña.


A los pies de este monte, se encuentra la Iglesia de Boyana, un monumento medieval, declarado por la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad. Es una iglesia ortodoxa, que bien merece una visita, ya que se encuentra muy bien conservada y debe su fama a las pinturas o frescos bizantinos que recubren sus muros.

Sofía además, cuenta con una prestigiosa Universidad. El edificio, imponente, resulta muy atractivo de recorrer, siendo el mismo, de un estilo barroco.

Los museos más destacados para visitar en Sofía son: el Museo Nacional de Arqueología, que funciona en la Mezquita Bayuk. Un bonito edificio en donde se puede observar piedras preciosas y cristales gigantes.

Y el Museo Nacional de Historia: en él se exhiben los Tesoros del Oro, objetos de cerámica, alfombras y otras artesanías que reflejan las costumbres y cultura búlgara.

Cerca de Sofía, hay muchos pueblos y ciudades con encanto, muy difíciles de pronunciar, pero de una singular belleza.

Nos vamos entonces hacia Pravets, una pequeña localidad rural muy cerca de Sofía, a sólo 40 minutos de ésta.

Es una buena alternativa para quienes buscan tranquilidad y realizar eco turismo, ideal además, para una escapada de fin de semana.

A 3 km de Pravets, tenemos para visitar el Monasterio de San Teodoro Tirón, el cual funciona como alojamiento. Este edificio, que tiene también una capilla, ha sido destruido en el siglo XVIII, y vuelto a construir varios años después.

Un poco más lejos, a 150 km de allí, se encuentra otro monasterio, el de Rila, el cual vale la pena visitar ya que es Patrimonio de la Humanidad. El mismo acoge la Iglesia de la Natividad, la cual se destaca por los frescos que decoran sus muros.

Próximo a Pravets, se encuentra Koprivshtitsa, un encantador pueblo de montaña, que se destaca por sus calles empedradas y sus casas pintadas de colores vivos con arreglados jardines.

Otras de las características de este tranquilo lugar, son sus puentes de piedra, los cuales atraviesan muchos de los riachuelos que cruzan esta villa.

En Koprivshtitsa, podremos visitar varias casas museos, el principal atractivo de esta villa.

Kovachevitsa, es otra de las villas museos búlgaras. Sus casas, están enteramente construidas en piedra y madera.

Shiroka Laka, otro encantador pueblo, es conocido por sus casas antiguas y su fuerte tradición musical. Allí se encuentra la Escuela de Instrumentos Musicales, en donde se fabrican instrumentos típicos del Renacimiento búlgaro.

Melnik, es la ciudad más pequeña de Bulgaria, y es famosa por sus viñedos y su particular vino tinto.

En la ciudad de Smolian, tenemos para visitar el Museo Regional de Historia, y disfrutar de sus bosques de coníferas.

En Plovdiv, podemos visitar su casco antiguo, las ruinas del Teatro Romano, la Iglesia de los Santos Constantino y Elena y el Museo Etnográfico.

En Bansko, también se puede practicar esquí. Además cuenta con otros atractivos como la Casa Museo Vaptzarov y la de Neofit de Rila. La Iglesia de la Virgen y la de la Santísima Trinidad son otros de los puntos de interés en Bansko.

Veliko Tarnovo, es una ciudad real y está situada sobre tres colinas.

Rodeada por el Río Yantra, es interesante pasear por su casco antiguo, por la calle de lo artesanos y recorrer la Fortaleza Medieval de Tsarevets, en donde podremos disfrutar del espectáculo de luz y sonido.

Balchik, nos ofrece un jardín botánico y el Palacio de la Reina Rumana María.

Como has podido ver, cada uno de estos pueblos, y la capital Sofía, encierran una historia y un atractivo en particular, y representan muy bien la tradición y la cultura de Bulgaria.

Artículo escrito por Jorgelina Massoni para elblogdelviajero.com
Imagen 1 Catedral Alexander Nevski de Sitomon
Imagen 2 Monasterio de Rila de Nigels Europe

1 comentario:

Jennifer dijo...

Tengo ganas de viajar, de aporvechar las millas que he acumulado de tantos pasajes en avion que he utilizado por mi trabajo. Nunca he ido a Bulgaria.... que opinan? voy allí? voy sola? le digo a una amiga si me puede acompañar?